–Tener un jardín en perfecto estado.

–Realizar labores de jardinería: podar, regar, aplicar abonos, eliminar malas hierbas, etc.

–Mantener el césped en perfecto estado.

–Limpiar el jardín.

–Realizar arreglos florales.

–Realizar trabajos de carpintería y herrería en el jardín.

El mantenimiento de un jardín requiere de una serie de cuidados específicos, tales como el riego, la fertilización, la poda, etc., dependiendo del tipo de jardín que se tenga.

Hay muchos tipos de jardines, pero los más comunes son el jardín inglés, el jardín japonés y el jardín italiano.

– Jardín Inglés: Un jardín inglés es un tipo de jardín en el que se utilizan pocas flores y se prefieren las hierbas, las coníferas y los árboles.

– Jardín Japonés: Un jardín japonés es una zona verde diseñada especialmente para disfrutar de la belleza de las plantas y el agua. Suele estar rodeado por una cerca y tiene un estanque en el medio.

– Jardín Italiano: Un jardín italiano es un jardín que tiene un estilo clásico y tradicional. Tiene un diseño simple y elegante, con una gran cantidad de vegetación y poca ornamentación.

La limpieza de jardín puede variar dependiendo de la cantidad de trabajo que requiera, el tamaño del jardín, y el estado en el que se encuentre. Por lo general, sin embargo, se puede estimar que cuesta entre 50 a 200 euros.

Hay que desbrozar hierbas cuando hay maleza que obstaculiza el paso o crece en exceso, dificultando el normal desarrollo de las plantas.

Hay distintos tipos de césped según su procedencia:

– Césped artificial: Se trata de un césped sintético, fabricado con fibras de poliéster o de polipropileno. Es muy resistente a las inclemencias meteorológicas y a las manchas.

– Césped natural: Es el césped que se encuentra en la naturaleza, generalmente procedente de semillas. Es resistente a las inclemencias meteorológicas, pero es más sensible a las manchas.

– Césped sintético: Es un césped artificial, fabricado con fibras de poliéster o de polipropileno. Es muy resistente a las inclemencias meteorológicas y a las manchas. 

Existen diferentes sistemas de riego, tales como riego por goteo, riego por aspersión, riego por inundación y riego por surcos.

– Riego por goteo: Riego por goteo es el riego que se aplica a través de un sistema de tuberías en las que se distribuye el agua a través de pequeños orificios, generalmente situados en la parte inferior de la tubería.

– Riego por aspersión: El riego por aspersión es un sistema de riego en el cual el agua es rociada sobre la tierra mediante una boquilla. La boquilla proyecta el agua en una fina lluvia sobre el terreno, lo que permite que el agua se seque rápidamente, evitando la formación de charcos.

– Riego por inundación: El riego por inundación es un fenómeno natural que se produce cuando el nivel de agua de un río, lago, mar o reservorio aumenta de forma repentina, provocando inundaciones en las zonas cercanas.

– Riego por surcos: El riego por surcos es una técnica de riego en la que se utiliza una hilera de surcos en el terreno para conducir el agua a las plantas.